miércoles, 27 de mayo de 2009

Orando por las naciones


Pastor Cash Luna
Orando por las naciones

Seamos intercesores y agentes de cambio en nuestro país. Todos debemos obrar con justicia y honestidad.

Jeremías 29:11 en La Biblia al Día (LBD) a dice: Pues conozco los planes que para ustedes tengo, dice el Señor. Son planes de bien y no de mal, para darles un futuro y esperanza.

Dios piensa darnos paz. Él siempre busca nuestro bien. En este pasaje le habla al pueblo de Israel cautivo en Babilonia, ciudad a la que llamaban la gran ramera. O sea que de ella no podía esperarse nada bueno. Recordemos que el pueblo de Dios sufrió domino de varios imperios. Estuvo en Egipto, fue cautivo por Babilonia y cuando Jesús nació estaban bajo el dominio de los romanos. Sin embargo, siempre fue guardado.

Jeremías 29:7 recomienda: Y procurad la paz de la ciudad a la cual os hice transportar, y rogad por ella a Jehová; porque en su paz tendréis vosotros paz. (LBD)

Debemos interceder por la paz de nuestra ciudad y por la de aquella donde nos encontremos porque de eso depende también nuestra tranquilidad. Si estás en una ciudad extraña, ora por ella. Dios le decía al pueblo prosperen y multiplíquense porque estarán largo tiempo allí. Hay que luchar contra tinieblas y potestades del mal para conseguir la paz.

Siete intercesiones

Cuando se ora por una nación hay que tomar en cuenta siete áreas básicas. Primero las familias que son base fundamental de una sociedad. Cada una de ellas tiene la responsabilidad de educar a los ciudadanos. Nadie sino la familia forma en valores, modales, costumbres y hábitos. Cierta vez, una señora me pidió que reprendiera a su hijo, pero le respondí que la responsabilidad de educarlo era de ella, yo no podía hacer su trabajo. Debemos orar por hogares integrados porque así reduciremos la violencia e intolerancia. Ora primero por tu familia y luego por todas las demás.

Segundo, Ora por la iglesia, sus líderes y congregados. Todos somos parte de ella y debemos dar buen ejemplo. No solamente el pastor debes ser íntegro. La paz es una cadena de la que debemos formar parte. Debe construirla tanto el maestro como el alumno, el que compra y el que vende, el ciudadano y el gobierno. La paz es responsabilidad de todos, no solamente de los líderes.

Tercero, Oremos por los educadores que contribuyen a formar buenos ciudadanos. Yo todavía me eduqué en un sistema de mucha disciplina y orden. En el colegio nos exigían hacer una fila impecable antes de entrar a clases y revisaban uno a uno la presentación y limpieza. Había castigos como reglazos y halones de oreja para quienes no obedecía. Si me quejaba con mi mamá, ella me emparejaba por chismoso y mal portado. Ahora esto ya no es posible sin escuchar la queja de los padres de familia. Le huimos a la disciplina y educación rígida. El em ministerio tenemos una escuela de liderazgo y una noche encontré fuera de clase a una joven que no pudo entrar porque llegó tarde. Sin embargo estaba consciente de que así debía ser. No se sentía ofendida ni afectada, asumió que era otro aprendizaje para lograr ser una buena líder. Cuando Sonia estudiaba secretariado y quemaban buses, en el colegio le exigían llegar a pesar de todo, así tendría que hacerlo cuando trabajara. Es necesario orar por los centros educativos para que vuelva la disciplina y buenas costumbres.

Cuarto, hay que orar porque los espectáculos públicos sean proveedores de sana cultura, educación y alta moral. Que las tinieblas no se apoderen de ellos.

Quinto, es urgente orar para que los medios de comunicación sean responsables en llevar la verdad en todo lo que divulguen.

La Economía es el sexto objetivo de nuestra oración. Está comprobado que la pobreza es uno de los motivos de la violencia. El bienestar económico es necesario para la tranquilidad del espíritu. Debemos orar por la prosperidad de comerciantes, fabricantes y exportadores que generan empleos para que todos estemos bien.

Nuestra séptima intercesión debe ser por los gobernantes. Para vivir quieta y reposadamente debemos tener un sistema de gobierno eficiente y confiable. Si queremos ver un cambio en nuestro país es necesario que trabajemos por ello y oremos por todos.

Manifestaciones de crisis

Jimmy Chamorro Cruz, importante político, en uno de sus libros anota: “La palabra crisis es una vieja realidad experimentada por el hombre en todos los tiempos. Hombres en crisis determinan la calidad del ambiente que les rodea. En la actualidad ya no hablamos de crisis de liderazgo sino de liderazgo en crisis. La pobreza, la corrupción, la violencia, el terrorismo, la impunidad y la desintegración familiar no son la causa de la crisis sino la manifestación de esta”.

Los problemas de violencia y corrupción son la evidencia de la crisis que se vive todos lo ambientes de la sociedad, no solamente en el gobierno y tenemos que cambiarla con el poder de la Palabra de nuestro Señor. Todos somos agentes de cambio, porque formamos parte de la nación. No te sientas espectador, eres protagonista y como tal debes actuar obrando bajo la voluntad de Dios.

Recuperar los valores

Proverbios 28:2 advierte: Cuando en la nación hay corrupción moral, su gobierno cae fácilmente; pero con dirigentes honrados y sensatos hay estabilidad. (LBD)

La versión Reina Valera lo dice así: Por la rebelión de la tierra sus príncipes son muchos; más por el hombre entendido y sabio permanece estable. En las elecciones de gobernantes podemos verlo. Hay tantos partidos políticos porque la rebelión que enfrentamos nos divide. Por el contrario, la sabiduría da estabilidad y genera entendimiento. Una y otra vez debemos orar para que cese la corrupción a todo nivel, en casa, en la oficina, en el gobierno y en cada uno de nosotros. La honradez es fundamento para una buena convivencia.

Proverbios 29:2 dice: Cuando los buenos gobiernan, el pueblo se regocija; pero gime cuando los malvados tienen el poder. (LBD)

Todos somos gobernantes en alguna situación y lugar específico. Así que debemos pedir porque el sentido de justicia prevalezca en las personas que de alguna forma están en eminencia: jefes, maestros, padres de familia, pastores, directores, incluso los hermanos mayores.

En Proverbios 16:12-13 se lee: Horrible cosa es que el rey haga el mal. Su derecho a gobernar depende de su honradez. El rey se regocija cuando su pueblo es veraz y honrado. (LBD)

La honestidad y honradez son valores que debemos cultivar siempre. Oremos por ello, no sólo en momentos difíciles cuando ya es evidente la carencia. Hay cosas que no podemos cambiar, pero buscar estos valores en el diario vivir sí está en nuestras manos, así que actuemos.

Proverbios 20:26- 28 continúa: El rey sabio acaba con el crimen mediante severo castigo. La conciencia del hombre es el faro del Señor que pone al descubierto sus móviles ocultos Si el rey es bondadoso, honrado e imparcial, su reino se mantiene seguro. (LBD)

Todos debemos ser bondadosos, honrados e imparciales para que la actitud de justicia llene nuestro país. Solamente así podremos encontrar la paz que tanto anhelamos.

Sabiduría y prudencia

Proverbios 1:7-9 aconseja: Cómo adquiere sabiduría el hombre? Primero, confiando en el Señor y reverenciándolo. Solamente los necios se niegan a recibir enseñanza. Escucha a tu padre y a tu madre. Lo que de ellos aprendas te dará buena fama; te hará adquirir mucha honra. (LBD)

Y el Salmo 2:10-11 complementa: Escuchen, reyes y gobernantes de la tierra, mientras queda tiempo. Sirvan al Señor con temor reverente; regocíjense temblorosamente. (LBD)

Consejo y temor de Dios son claves para lograr la justicia que nos permita alcanzar la paz. Hemos perdido el temor de Dios. Cuando me convertí al Señor me enseñaron que la palabra “temor” se refiere a respeto y reverencia, pero la traducción literal es “miedo”. Quizá no queremos tener la imagen de que Dios es un ogro malvado que castiga pero nunca olvidemos que Su juicio es eterno. Jesús mismo lo dijo: no le tengan miedo al que pueda matar el cuerpo, ténganle miedo al que puede mandar su alma al infierno. Dios es justo y misericordioso así que debemos temer su juicio, Él es el Señor de la tierra y todo lo que en ella hay. El día que comprendas que le debes cuentas por todo lo que haces, seguro tendrás más cuidado con tu proceder. Cuando ensucias la calle estás degradando algo que le pertenece al Señor. Oremos por tener gobernantes justos, temerosos de Dios y humildes para escuchar consejo.

El rey David fue quien pidió prudencia a través de este Salmo. Cuando nuestro Señor de señores habla debemos escuchar. En la Biblia tenemos dos casos. El de David y el de Faraón de Egipto que se negaba a liberar al pueblo de Israel. Cuando David cometió el grave error de acostarse con una mujer ajena, se arrepintió a la primera advertencia del profeta Natán. Por el contrario, Faraón fue advertido diez veces por Moisés pero se negaba a darle libertad a los israelitas. Incluso los persiguió cuando ya los había dejado ir y su castigo fue soportar las plagas para finalmente ser testigo del poder de Dios en las aguas del Mar Rojo. La Biblia dice que el corazón del rey está en manos de Dios que debe tener misericordia.

Durante años hemos protestado por los gobiernos y estoy seguro que el Señor tendrá misericordia de nuestro pueblo. Pidamos perdón y roguemos por los gobernantes.

Dios tiene pensamientos de paz y ha prometido un buen final para nuestro país. Continuemos en la batalla espiritual, demostremos fe y ánimo para que el Señor obre en la nación.

Si de corazón sincero clamamos, Jehová nos escuchará y sanará nuestra tierra. Entrégale tu vida para que te transforme y luego puedas cambiar la sociedad. Pídele que te convierta en instrumento de bendición y en un intercesor constante por tu país.




No hay comentarios: